martes, 11 de marzo de 2014

KUKA Robots (0) - Timo Boll (1)...

2009 - 2018:
  • Habrá un renovado interés en el test de Turing, que fue propuesto por Alan Turing en 1950 como una forma de comprobar la inteligencia en una máquina. Aunque las computadoras aún fracasarán en el test, crecerá la confianza en que lo pasen en una o dos décadas.
  • Habrá mucha especulación sobre la potencial capacidad de sentir (esto es, la consciencia) de la inteligencia basada en computadoras. La inteligencia cada vez más aparente de las computadoras habrá estimulado el interés en la filosofía.

2019 - 2028:
  • Los robots domésticos estarán por doquier y serán fiables.
  • Las computadoras harán la mayor parte de la conducción de vehículos, los humanos tendrán de hecho prohibido conducir en las autopistas sin asistencia. Además, cuando los humanos tomen el mando, el sistema informático de a bordo monitorizará sus acciones y tomará el control cuando el humano conduzca imprudentemente. Como resultado, habrá muy pocos accidentes de circulación.
  • Los humanos empezarán a tener profundas relaciones con personalidades automáticas, que tendrán algunas ventajas sobre los compañeros humanos. La profundidad de algunas personalidades por computadora convencerá a algunas personas de que deberían dárseles más derechos.
  • Las relaciones entre robots y humanos comenzarán a medida que las personalidades simuladas se vuelvan más convincentes.
  • Mientras que un número creciente de seres humanos creerán que sus computadoras y las personalidades simuladas con las que interactúan son inteligentes hasta el punto de la consciencia a nivel humano, los expertos descartarán la posibilidad de que alguna pueda pasar el test de Turing.

  • Los sectores industrial, agrícola y de transportes de la economía estarán casi completamente automatizados y emplearán a muy pocos humanos. En todo el mundo, la pobreza, la guerra y las enfermedades serán casi inexistentes gracias a que la tecnología aliviará las carencias.
  • El crecimiento de la inteligencia artificial provocará un verdadero movimiento de los «derechos del robot», y habrá un debate público abierto sobre qué clase de derechos civiles y protecciones legales deberían tener las máquinas. La existencia de humanos con altos niveles de aumento cibernético y de un mayor número de otras personas con implantes cibernéticos menos extremos llevará a cambiar la definición de lo que constituye un «ser humano».
  • Las inteligencias artificiales reivindicarán ser conscientes y pedirán abiertamente el reconocimiento de ese hecho. La mayoría de las personas admitirán y aceptarán esta nueva realidad.
  
Las máquinas ya nos han ganado al ajedrez pero, ¿qué hay de un deporte más físico como el tenis de mesa? La compañía de robots industriales KUKA había organizado una curiosa competición: Timo Boll, uno de los mejores jugadores del mundo de ping-pong, contra uno de los brazos robóticos más rápidos y precisos jamás construidos. Ambos enfrentados a un partido ¿Quién ha ganado?

mejor a 1080p


De momento la humanidad puede estar tranquila en este frente. Los robots no nos pueden vencer al ping-pong, al menos a Timo Boll. De todas formas es una inteligente campaña de marketing de Kuka, en la que demuestran cómo ha avanzado la robótica industrial en las últimas décadas.

Sin embargo no queda mucho hasta que otro robot venza al hombre. En ello se encuentra también el UHTTR-1 (Ulf Hoffmann Table Tennis Robot), un brazo robótico montado sobre un raíl que gracias a un sistema de visión artificial de dos cámaras es capaz de realizar el seguimiento de la pelota, situarse en el espacio y actuar de manera correcta en cada momento.

mejor a 720p


Gracias a sus servomotores y una construcción ligera en aluminio se consigue esta rápida capacidad de respuesta.




Fuente:
Gizmodo

No hay comentarios:

Publicar un comentario